Todo tiene su tiempo….
(Eclesiastés 3:1) “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora” Cuando recibimos esa palabra, y esa promesa de Dios que nos llena de tanta alegría y confianza, y nos brinda esa seguridad de que esa promesa tan esperada está próxima a cumplirse, mañana mismo…..pero de repente no necesariamente ocurre así……Hay promesas que toman su tiempo en cumplirse. Pueden ser días, semanas, como pueden ser años. Pero (Habacuc 2:3) nos dice: “que aunque tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará” . Para que esa promesa pueda ser efectiva y fructífera en tu vida debe estar en secuencia con el tiempo predeterminado de Dios. El orden y el tiempo de Dios es perfecto. Cuando intentamos ayudar a Dios lo que hacemos es retrasar el proceso, y Dios no necesita de nuestra ayuda. Mantenernos en sintonía con Dios nos permitirá caminar hacia la promesa, sin adelantarnos, n...